Palacio Gran Via, A Royal Hideaway Hotel Granada, Granada

Tuve una estancia maravillosa en este hotel. Me impresionó enormemente la atención al cliente, ya que el personal fue increíblemente amable y servicial en todo momento. Las habitaciones estaban decoradas con un encanto especial, fusionando lo moderno con lo histórico. La terraza de la azotea es un lugar excepcional para disfrutar de vistas espectaculares. Sin embargo, aunque el desayuno era delicioso, me habría gustado ver un poco más de variedad en la selección de platos.

Tuve una estancia maravillosa en este hotel. Me impresionó mucho el servicio al cliente, con un personal que se mostró siempre amable y dispuesto a ayudarme. Las habitaciones están preciosamente decoradas, fusionando el lujo moderno con un encantador toque histórico. La terraza en la azotea es un verdadero tesoro para disfrutar de las vistas. Sin embargo, aunque el desayuno fue de buena calidad, sentí que habría sido ideal contar con un poco más de opciones en la selección.

Tuve una experiencia maravillosa en este hotel. El servicio al cliente fue excepcional, con un personal que se mostró muy amable y dispuesto a ayudarme en todo momento. Las habitaciones son hermosas y están decoradas con un encanto que mezcla lo moderno y lo clásico. La terraza en la azotea es realmente un lugar especial para relajarse y disfrutar de las vistas. Sin embargo, aunque la selección de desayuno es de buena calidad, sentí que podría haber más variedad para satisfacer todos los gustos.

Tuve una estancia maravillosa en este hotel. El personal fue excepcionalmente amable y servicial, y la decoración de las habitaciones estaba perfectamente lograda, combinando el lujo moderno con un toque histórico. La terraza en la azotea era el lugar ideal para disfrutar de las impresionantes vistas. Sin embargo, siento que el desayuno podría ofrecer más variedad y, aunque todo fue genial, la falta de estacionamiento gratuito fue un inconveniente.

Tuve una estancia maravillosa en este hotel, donde el servicio al cliente me impresionó enormemente. Los empleados fueron sumamente amables y dispuestos a ayudarme con cualquier consulta. Las habitaciones están diseñadas con un encanto histórico que hace que uno se sienta especial. La terraza en la azotea es un lugar imperdible para disfrutar de las vistas y relajarse. Sin embargo, aunque la oferta de desayuno es buena, podría haber un poco más de variedad para satisfacer todos los gustos.